воскресенье, 4 января 2015 г.

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Me dirigí al gimnasio, donde el único profesor que realmente quería ver lo sería. La señora Fletcher. Moscow escort Yo la conocía como Miss Lambert, pero en el verano después de mi partida había casó. Yo no sabía quién era el señor Fletcher, yo sabía que era un hombre muy afortunado.
Ella no estaba en el gimnasio, la encontré afuera con un grupo de chicas que conocía a jugar al tenis. Estaban terminando y me dijo hola a las chicas cuando salían para el vestuario. La señora Fletcher sonrió cuando me vio, y le sonreí, ella tenía 28 años, 5 pies 6 con ojos azules y cabello castaño longitud media y llevaba una camiseta blanca que mostraba sólo una pizca del sujetador deportivo negro por debajo y muy falda gimnasio sexy.

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"Hola Neil, ¿cómo estás?" Ella preguntó mientras caminábamos a su oficina.
 

"Estoy muy bien, acabo de unos días de descanso de la universidad. ¿Y tú?" Dije.
Llegamos a su oficina y cerró la puerta detrás de nosotros, me quedé mirando su culo mientras ella prestó una y sacó una botella de agua de una caja térmica.
"¿Quieres uno?" -preguntó mientras tomaba un sorbo de la de ella.
"Sí, está bien", le dije, y la vi doblar otra vez.
Ella me dio un Vittel.
"Así que, ¿cómo es la vida de casado?"
Él dejó caer los hombros, y ella me miró a los ojos "No vuelvas a casarse Neil, es horrible, me gustó la libertad de estar sola, no sé por qué nunca lo hice".
Me adelanté y la abracé, no sé por qué lo hice, se sentía como lo que hay que hacer, me estaba acariciando su cabello y decirle que todo iba a estar bien. Empezamos a besar. Yo no sé por qué. Acaba de suceder. Se sentía bien, así que no se detuvo. Ella entonces me empujó la cabeza hacia abajo su cuerpo. Yo sabía lo que quería. Quería también.

Levanté la falda y deslizó su tanga negro apagado. Su coño se veía hermosa, totalmente afeitada a excepción de un pequeño triángulo de pelo por encima de ella. Se pasó los dedos por el pelo mientras lamía su coño, ella estaba buenísimo, levantó la pierna y se la puso en el hombro. Ella estaba muy mojada ahora y me empezó a chupar su hinchada, palpitante clítoris. "Oh sí, eso se siente muy bien", dijo.
Me detuve, miré a ella y le dije "quiero follarte"
"Vamos entonces, vamos a hacerlo en las duchas del personal"
Ella llevó a mi a través de una puerta lateral en la sala de profesores cambiante, no había nadie más allí, y sería perturbado allí.
Nos desnudamos el uno al otro; besar el cuerpo del otro acabando las manos sobre la piel del otro. Las duchas eran bastante grandes, se los enciende y dijo: "No me lo perrito Neil".
Se puso a cuatro patas, el agua de remojo su cuerpo y haciéndola aún más sexy Mi pene estaba tan duro ahora cuando me arrodillé detrás de ella, me llegó alrededor y empezó a frotar su clítoris, ella comenzó a balancearse contra mi mano, y decidí que era tiempo para darle a ella. Me deslizo mi roca dura polla en ella y se quedó sin aliento.

"Fuck yeah, se siente tan bien Neil, darle me duro"
Se lo di con fuerza, deslizando mi polla dentro y fuera de ella como ella pidió más.
De repente me detuve y dije "Quiero ver tu cara cuando me hacen correr a ti"
Saqué mi polla, pulido con sus jugos de su coño y me fui y conseguí algunas toallas, los puse en el suelo de la ducha, sin importarle que se mojaban, le eché en ellos y la miré a los ojos, fue frotar su clítoris, mi corazón estaba acelerado, yo no podía creer que estuviera haciendo esto, yo había tiró fuera un par de veces pensando en hacerlo, pero esto era mejor que cualquier fantasía colegial.
Ella sacudió sus caderas mientras me deslicé mi polla dentro y comenzó a golpear su coño, me agaché y besé su "sentirse bien?" Le pregunté. "Fuck yeah", fue su respuesta "tu polla me llena muy bien". Todo lo que ella dijo hizo que mi polla dura, me la follo más rápido.
Me di cuenta de su orgasmo fue muy pronto. El mío era demasiado. "¿Quieres que yo saco cuando me corro", le pregunté.
"¿No te atreves mierda", respondió ella, y me abrazó más fuerte con sus piernas.
"FUCK ME NEIL", exclamó. Fue un buen trabajo no había nadie cerca o que nos hubiera escuchado y venido a investigar.
"Oh, mierda me voy bebé"
"Sí, yo también, aquí viene"
Cada centímetro de mi pene estaba dentro de su coño cuando vinimos juntos. Hacía tanto calor. Sólo nos alojamos allí por un tiempo, en las duchas, mi polla todavía dentro de ella.
"No he cum como que en las edades, gracias", dijo, La levanté y la llevé a los bancos. Ella se sentó en mi regazo mientras secamos el uno al otro y se besaron, besos largo y persistente mientras mis manos se movieron sobre su piel suave.
"¿Recuerdas el año pasado cuando estaba sólo tú y yo en la clase de Inglés después de la escuela, yo te estaba ayudando con su Shakespeare, y el uso que la tapa blanca y pantalones negros?" Ella me preguntó mientras nos besamos.

"Sí, yo", le dije, preguntándome dónde iba.
"Te vi seguir mirándome, como tú querías, eso fue un giro tan adelante, que no podía esperar a llegar a casa, quitarse toda la ropa y acostarse mi cama con mis piernas abiertas y follar mi coño con mi vibrador fantasear acerca de usted ".
Yo no podía creer lo que acababa de oír. Ella me besó apasionadamente y puso su mano entre mi pierna para sentir mi polla, que se endureció el segundo lo tocó.
Ella se puso de rodillas y empezó a lamer mis muslos internos, y luego besar la punta de mi polla, acariciándola luego tomar todo en su boca mientras se hinchó tan duro como lo había sido antes de mi llegada, cuando estaba duro otra vez se levantó y tomó mi pene en su mano mientras guiaba en su coño lentamente.
Acabábamos de jodidos, ahora era el momento de hacer el amor, poco a poco nos muelen a cabo caderas juntos, construyendo un ritmo como nos besamos y me pasé las manos por la espalda, el envío de toda la energía en su cuerpo hasta su coño. Este era lento y suave, un contraste con anterior que había sido jodidamente difícil pura y simple. Esto era más bonito.
"Oh, usted sabe cómo hacer que una mujer se sienta bien Neil"
"Bueno me gusta hacer una mujer como usted se siente bien"
Hacía tanto calor, estábamos haciendo el amor durante aproximadamente una hora antes de que ambos llegaron. Su respiración se corta y afilada y nos besamos como nuestros orgasmos tanto llegó en el mismo tiempo.
Una vez que habíamos bajamos ropa de nuevo, Sarah me entregó una hoja de papel.
"Mi número de teléfono," Ella explicó "no ser un miedo de usarlo"
Yo sabía que no iba a ser.

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